Destinataria de la subvención: Lisa
Beneficiario de la subvención: Lisa
Ha sido un cambio difícil pasar de intentar sumar una vida a luchar por la mía propia.
Diagnóstico: Cáncer de mama en estadio II B
Tratamiento: Quimioterapia, radioterapia y cirugía
Subvención utilizada para: Alojamiento
Los planes familiares se desbaratan
Lisa ama a su hijo de dos años más de lo que puede expresar y estaba emocionada de comenzar a intentar tener un segundo hijo para ampliar su pequeña familia. Su trabajo como gerente de una tienda requería hasta 60 horas de trabajo a la semana, además de una hora de viaje de ida y vuelta. Era un desafío, pero satisfactorio, y el esposo de Lisa decidió ayudar a la familia dejando su trabajo y trabajando desde casa para poder cubrir más responsabilidades de cuidado infantil.
Todo parecía ir según lo previsto... y entonces Lisa sufrió un grave accidente de coche con un conductor ebrio. El accidente la dejó conmocionada y herida, incapaz de hacer algo tan sencillo y significativo como cargar a su hijo. Fue un episodio aterrador, pero los problemas de Lisa apenas empezaban.
En febrero de 2017, se enteró que tenía cáncer de mama en etapa II.
Más citas médicas que las que he tenido en toda mi vida
Desde que le diagnosticaron cáncer, Lisa se sometió a una mastectomía parcial, le extirparon cuatro ganglios linfáticos y recibió quimioterapia y radioterapia. A lo largo de estos tratamientos extenuantes, Lisa ha intentado mantener su vida lo más normal posible.
“Sigo luchando y demostrándole a mi hijo que no importa el largo de tu cabello o incluso si no tienes”, nos escribió en su solicitud de subvención.
A pesar de los esfuerzos de Lisa, ella y su familia están pasando apuros. “He tenido más citas médicas que en toda mi vida”, nos escribió, “y derramé más lágrimas de las que creía posibles”. Uno de los grandes desafíos de Lisa son las dificultades económicas que le ha causado el cáncer.
La frugalidad no siempre es suficiente
Lisa nos cuenta que “a pesar de tener un presupuesto y ser frugales, nuestros gastos siguen excediendo nuestros ingresos y muchos de ellos se pagan con tarjetas de crédito”. Su marido sufrió una gran reducción salarial cuando empezó a trabajar por cuenta propia y la pareja todavía está pagando los gastos relacionados con el accidente de coche. El diagnóstico de cáncer de mama de Lisa los ha puesto al borde del abismo financiero.
Lisa es la prueba de que el cáncer de mama puede poner en peligro financiero incluso a las personas más cuidadosas. Tener un buen trabajo y ceñirse a un presupuesto a veces no es suficiente cuando el cáncer entra en escena.
Ayudando a Lisa a encontrar su nueva normalidad
En su solicitud de subvención, Lisa explicó que “todavía estoy tratando de aceptar mi diagnóstico y cómo encontrar una nueva normalidad, pero estoy agradecida por cada día que estoy aquí para besar a mi esposo, abrazar a mi hijo y alentar a alguien que acaba de ser diagnosticado.
En SOPFCA, nos sentimos inspirados por la valentía de Lisa y su dedicación a su familia y a ayudar a otras mujeres que han sido diagnosticadas. Nos complace haber podido ayudar a Lisa a encontrar su nueva normalidad con una subvención de SOPFCA y agradecemos a nuestros donantes por permitirnos apoyar a mujeres increíbles como Lisa.